¿Mi bebé podría tener un cólico?
Los bebés cuando no están durmiendo, están comiendo o están derritiendo tu corazón. Sin embargo, también lloran bastante, algunos bebés lo hacen más fuerte y por más tiempo que los demás, incluso cuando no están hambrientos, cansados o en la necesidad de un cambio de pañal. El cólico es a menudo el culpable de estos episodios llenos de lágrimas.
¿Qué es un cólico?
Es un patrón de comportamiento que causa llanto excesivo sin alguna causa aparente y se presenta hasta en un 25% de los todos los niños.
Estos comportamientos como llantos inconsolables, normalmente empiezan después del nacimiento. Llegan a su pico en la semana seis y desaparecen por cuenta propia en el tercer o cuarto mes del bebé.
¿Qué causa los cólicos?
Los expertos no están tan seguros de la causa de los cólicos o porqué algunos bebés lo experimentan y otros no. Sin embargo, existen teorías:
Un sistema inmaduro: Una creencia bastante extendida es que un bebé con cólicos aún no tiene el sistema nervioso maduro para lidiar con la vista, sonidos y la estimulación que ocasiona la vida fuera del útero. Los períodos prolongados de llanto, son la forma del bebé de auto consolarse y combatir con los estímulos abrumadores.
Un sistema digestivo sensible: La palabra cólico proviene de la palabra griega kolikos, que significa colón. Algunas teorías sugieren que un cólico ocurre cuando la comida se mueve muy rápido a través del sistema digestivo del bebé o no está completamente digerida. Es cierto que los bebés propensos a cólicos son más flatulentos.
Alergia a la proteína de leche de vaca
El cólico o llanto inconsolable, es un tema distintivo de una alergia alimentaría infantil comúnmente llamada alergia a la proteína de leche de vaca. Un bebé alérgico a la proteína de leche de vaca puede reaccionar ante fórmulas con proteínas de ésta, mientras que un bebé lactante puede estar expuesto a fragmentos de la proteína de leche de vaca en la dieta de su madre que se transmiten a través de la leche materna.
La alergia a la proteína de leche de vaca en bebés lactantes es rara; si es diagnosticada, la madre tendría que alterar su dieta para seguir alimentado al bebé a través de lactancia. En adición, al cólico causado por la alergia a la proteína de la leche podrían también tener reflujo, diarrea, constipación, gases, erupciones en la piel y problemas respiratorios, y existen casos poco comúnes en los que se presentan incluso problemas mayores, tales como dificultades para respirar, sangrado rectal, urticaria y anemia.
Reflujo
El reflujo gastroesofágico o GERD es comúnmente confundido con cólicos, los bebés que tienen GERD puedes escupir frecuentemente mucho líquido, vomitar forzadamente o atragantarse.
Exposición al humo del cigarro
Estudios sugieren que los bebés son doblemente propensos a padecer cólicos cuándo la madre es fumadora. Los químicos en el humo del cigarro pueden hacer más lento el desarrollo del sistema nervioso central del bebé o del sistema gastrointestinal.
Consulta a tu médico.