Una dieta de eliminación seguida de una provocación alimenticia es una prueba en la que primero se eliminan las proteínas de la leche de vaca de la dieta para luego reintroducirlas lentamente. Esto debe hacerlo un experto en un lugar con las condiciones especializadas, como un hospital o clínica.
Si hay sospecha que tu bebé sufre alergia a la proteína de la leche de vaca y tiene riesgo de presentar síntomas graves con la prueba de provocación, tu médico puede recomendar la realización de una prueba de punción cutánea o un análisis sanguíneo como parte del diagnóstico.